lunes, 23 de noviembre de 2009

"Otitos"


Quitar el pecho no fué fácil, tuvo para los tres, tal como lo imaginamos, momentos de enojo intenso, de dolor, de desesperación y también momentos dulces de aceptación y reconciliación, casi podemos decir que hoy eso es asunto superado. Lía ya no pide "pa" y además prácticamente duerme sus noches de corrido, lo cual hasta hace poco parecía imposible. Ahora cuando Lía se va a dormir, se acomoda de ladito y pide "otitos" lo que significa que me acueste enfrente de ella y le deje al alcance mis ojos, la forma en que se arrulla ahora es poniendo su palma de la mano extendida a la altura de mi ojo para que que yo la acaricie con mis pestañas. Este es un gesto antiguo, ya lo hacía mientras tomaba su "pa", pero ahora que ésta ya no está, nos queda el consuelito de que se ponga cerquita para dormir y pueda conciliar el sueño al ritmo de mis pestañas.